ENLATANDO MOMENTOS

Lo leí en algún sitio. Últimamente sólo tengo tiempo para mirar los blogs de pasada y por el rabillo del ojo, y no recuerdo de donde saqué la idea, así que si por favor alguien me puede ayudar sería genial porque me encantaría acreditar la fuente como se merece.

El caso es que en los tiempos que corren, me pareció interesante esta idea: Qué tal si en lugar de afrontar el nuevo año (voy con un pelín de retraso, ya lo se) llenándonos de propósitos que en muchos casos solo nos llevan a frustrasnos al ver que no los cumplimos, simplemente nos centramos en las cosas buenas del día a día?

Pues la forma de materializar esto y dejar constancia de ello, es tan simple como ir escribiendo en papelitos aquellos momentos que te hayan hecho feliz; simples cosas o instantes que te gustaría recordar, y buscar un recipiente mono en donde atesorarlos.

Aunque a priori puede sonar un poco ñoño, creo que es una fantástica forma de hacer un balance más equilibrado al finalizar el año, porque siempre tendemos a recordar con más viveza lo negativo que lo positivo. De esta forma nos daremos cuenta de la cantidad de cosas buenas que nos han pasado a lo largo de los últimos 365 días. ¿Cómo lo véis?

Yo he construido mi urna particular con una lata de leche en polvo, y así además reciclo. Tan simple como forrarla con un papel bonito y ponerla en un lugar bien visible en casa para no olvidar que de cada día se puede sacar algo bueno. Estos son los materiales y los pasos a seguir si os animáis a hacer una lata como la mía:

Lo primero es medir el contorno de la lata y también su alto. Ayuda tener una cinta métrica y si no, puedes hacer rodar la lata a lo largo de una regla como la de la imagen. Luego hay que cortar una pieza de papel estampado y de papel adhesivo de tamaño ligeramente superior a las medidas tomadas. Pegar el papel adhesivo sobre el papel de regalo y marcar con un lápiz por la parte no plastificada, un rectángulo con las medidas que tomamos. Cortar y pegar a la superficie del bote con pegamento de barra.

Para la tapa hice un rótulo en photoshop, lo imprimí sobre un folio y seguí los mismos pasos que para el cuerpo de la lata.: plastificar, recortar, comprobar que se ajusta bien a la tapa y pegar con pegamento de barra. Podéis descargaros un pdf con el rótulo que utilicé pinchando en el siguiente enlace: best of 2013

Una vez lista sólo queda ir llenándola con los momentos más destacados, pequeños o grandes, y esperar un año para comprobar que seguramente habremos coleccionado un buen puñado de ellos.

EDITO: No es lo que buscaba pero María José de "Siete Pinceles" ha hecho un post genial basado en esta idea que no os podéis perder. Su tarro es sencillamente fantástico. Se llama tarro anticatarro emocional y es precioso y super fácil de hacer. Échale un vistazo pinchando aquí.

FOTOS LALOLE